He de mirarte a los ojos
No me gusta tu cansancio
Me duele tu cuerpo agotado
Tus pasos arrastrados
Me duele cuando te esfuerzas
Sientes que me das poco y sufres
Solo quiero correr contigo
Atravesar un campo descalzo
Inundar de peonias nuestro camino
No importa si desnudos o con ropa
Solo quiero crear un camino contigo
De todos los colores y sus combinaciones
No duermo pensándote
No dejo de amarte
Me gusta soñarte y verte
Verte y soñarte
Mi día feliz
Es el día en que tus ojos brillan
Soy feliz amándote
Me siento triste amándote
Desearía ser la mujer
Que mires por última vez
Desearía que tus ojos fueran
Lo que mire por última vez
Amo ser tu consuelo y tu dicha
Amo agobiarte sin excusas
Amo hacerte reír
Amo la causa de mi sonrisa
Me gusta flotar en tu pensamiento
Me gusta que inundes mi futuro
Me gusta hacer planes inalcanzables
Me gusta la casualidad de nuestras alegrías
Tengo contigo
La simpleza de la vida
La rutina duradera
La estabilidad de tus brazos
Nunca cedas al desamor
Sé ciego a mis errores
Sé ignorante de mi maldad
Quédate solo con mi mirada
Elia Santos
Enero 2023
Archivo de etiqueta: Amor
Los dos besos que te di…
Te di dos besos antes de marcharte,
No te di tres, ya volverá, pensé
Pero era verdad, te marchabas para siempre
Y yo, estoy aqui, he pasado por tu habitación
Te he añorado, en esa habitación ya hay alguien más
No quiero ocupar hoy tu habitación
Mañana ya conoceré al intruso
Tengo miedo de amarle como a ti
Ya mañana será…
Elia Santos
Octubre 2022
Cardiovascular
¿Qué te dijo la luna acerca del corazón?
Que llorar hace que el corazón
Cargue menos y sienta más y
que las sonrisas hacen que palpite de prisa.
¿Segura? Reiré más ¡Que buen cardiovascular!
Nido
Lo amo, más allá de la vida
Más allá del vuelo de los dos pájaros
He volado junto a usted
Sin miedos ni sanciones
He volado con amor
He hecho el nido y me he quedado
La tibieza de sus hojas me protegen
La confianza y la paz me llenan
La armonías que hoy habito
No se extiende al nido que dejé
Está solo y no hay forma de volver.
Elia Santos (julio 2020)
Oración

La noche cubre mi ventana Observo con nostalgia e imagino Trato de ver a través de los ojos de mis amores e imagino; la luz del sol, los árboles... Entonces cierro mis ojos y siento; el calor que azota, el sudor que corre por mi cuello Respiro y siento la humedad asfixiante Y entonces digo; Buenas noches e imploro A Dios que las cuide. Elia Santos 2020
Promesas
Alzar la mirada a lo alto ver el cielo azul, tener a alguien que te abrace, que te sostenga y sea tu voz cuando te quedas sin palabras. Cuando pienso en todo lo que tengo he de decirte que soy afortunada y espero que mi ir y venir no te abrume que me abraces y sostengas siempre a cambio te prometo; el amor genuino, olvidar los puntos suspensivos correr a tus brazos sin dudar darte todo en una mirada haré que sientas; que te amo. Elia Santos 2020 A mi esposo en este día que no es una fecha especial, pero él no sabe de fechas especiales, cualquier día es bueno para sorprender cuando se ama, y yo estoy aprendiendo eso.
Te amo…

Te amo por la paciencia que tienen tus brazos Cuando me abrazan fuertemente sin importarles, Que de mi cuerpo salgan espinas. Te amo por como me besas, ardiente y apasionado, Sin importarte que mis labios se hayan congelado. Te amo porque me desnudas despacio Te amo porque esperas sin importarte las estaciones Te amo porque sé que contigo estoy segura Te amo por que te necesito y tu piensas, Que soy fuerte e independiente Pero te confieso que te necesito Como el café que tu bebes cada mañana Como la esperanza en un roto corazón Así te necesito amado mío, amado esposo. Elia Santos 2020
Anhelos

Tantas historias tristes, tanto sufrimiento Una vez más entiendo, que disfrutar y vivir Es lo más acertado, no refutar la gracia Y contemplar más la belleza La compañía de aquellos; Que nos han dado fragmentos de sus vidas Que ya su vida pende de un hilo Y que se está rompiendo poco a poco Cuando llegue el día prodigioso Te abrazaré sin reparos, dejaré que me beses Y besaré tu frente; dejaré atrás los complejos Y tu que ya te fuiste; solo un abrazo me diste Y mi cuerpo completo lo reclama constantemente Añoro tanto tus caricias, esas caricias que no me diste Y yo, sabiendo que no querías parecer débil No quise que creyeras que yo sí lo era !Ah! que absurdo me parece ahora Si te tuviera enfrente, te abrazaría hasta que cedieras Te peinaria y te daría un masaje !Hasta un beso te daría! Elia Santos 14 de abril 2020
Primer contacto
Un pequeño fragmento de mi vida que tuvo como escenario el hospital «Mario Catarino Rivas» en el año 2012.

Era un día como cualquier otro, al menos así comenzó cuando me desperté aquel día, me encontraba en el hospital, estaba en sexto año de medicina (en Honduras son 8 años de formación), y hacía las tareas habituales que le corresponden a un estudiante; subir y bajar gradas, caminar de un lado a otro: entre el laboratorio, banco de sangre y tu sala asignada, y, como no había un lugar seguro donde dejar tus pertenencias, pues las andaba conmigo siempre, recuerdo que las metía en bolsos de tela que mi tía y mi madre elaboraban para mí, para que el peso no fuera tanto (La fibromialgia ya era mi fie amiga en ese tiempo y alguna otra patología…) en ese bolso cargaba de todo; libros, exámenes, instrumentos Médicos, jeringas, tubos de análisis…, y alguna mudada de ropa por si me tocaba algún turno (es lo que me encanta de la medicina, ni un día es igual a otro y nunca sabes cómo terminará.)
Y fue así, subiendo las gradas del primer piso cuando me vibró el celular, era una llamada del coordinador de la carrera, era extraño que me llamara, así que contesté.
—Elia, ¿estás en la pasantía de pediatría verdad?
—Si doctor—contesté.
—Un nuevo alumno se trasladó de Tegucigalpa, y se va a integrar a la pasantía, se llama Ronaldo Aguilar, espero que lo introduzcas, le ayudes en que sea posible, le he dado tu número para que te hable y lo pongas al tanto.
¡Ya se imaginan la emoción! La carrera de medicina en San Pedro Sula para ese año no era numerosa, en mi promoción no superábamos los 35 alumnos y en la pasantía de pediatría solo éramos 7, 6 mujeres y 1 hombre, así que lo primero que hice fue contarles las nuevas noticias a mis compañeros, todas estábamos ansiosas de conocer al nuevo compañero, y el único varón estaba más que aliviado de ya no tener que estar solo con mujeres, ese día hablamos solo de eso e incluso al llegar a nuestras casas los chats fueron gran parte en imaginarnos como era, había hablado por celular con él para darle horarios y todo lo que se necesitaba.
Al día siguiente al entrar al aula de clase mis ojos buscaron al «nuevo» y ahí estaba (debo confesar que hasta me arregle un poco más que de costumbre para la ocasión) ¡lastima que no era lo que esperaba! Intentamos hablarle, le hicimos muchas preguntas, pero él era hermético, de pocas palabras y se notaba que estaba muy incomoda con nosotras «nos miraba como a niñas» y es que todas teníamos alrededor de 23 años y él, ¿quién sabe?, parecía un poco mayor, de entrada, me había caído mal, muy mal y al pasar lo días ese sentimiento creció.
Pero con el tiempo, tuvimos la oportunidad de conocernos más y nos convertimos en buenos amigos, la química entre nosotros fue creciendo, nos gustábamos era un hecho, pero éramos tan diferente, incluso él me había dicho que yo representaba todo lo que no le gustaba en una mujer «infantil, caprichosa y orgullosa» y él era «callado, poco divertido y no me daba la razón» así que ser amigos fue la mejor opción.
Pasaron años y ya para mediados del 2016 después de varias relaciones fallidas de ambos, decidimos intentarlo y el intento nos llevo al altar un 13 de abril del 2019.
Actualmente construimos un mundo juntos, y sobra decir que consiente mis caprichos, me abraza fuerte cuando me pongo infantil y lo que es esencial; siempre me da la razón y yo he descubierto que es muy divertido, me hace reír todo el tiempo y lo callado no se le quita, pero soy buena haciéndole hablar y cuando no lo logro, he aprendido a darme por vencida, aunque lo intento luego.
Elia Santos
13 abril 2020
Un solo mundo

No existe nadie como tu Que me haga soñar y reír, Ayer te observé en silencio Sin que te dieras cuenta Estabas absorto en algún mundo Quizá desconocido para mí Y sentí celos... Estaré yo ahí? Así que sin pensarlo Te abracé por detrás Y bese tu frente Y tú, con una sonrisa tierna Me abrazastes y me sentaste Sobre tus piernas Y así comprendí, Que por muchos mundos Que quieras crear Siempre estaré ahí. Elia Santos Abril 2020